Al intentar visualizar la escena me vienen las lágrimas.Paro e intento dejar de pensar en mi trabajo o en mis hijas.
EEUU y su cultura armamentística debe hacérselo mirar.Al país de la libertad se le ha partido el alma con demasiada frecuencia y todos los que admiramos esa nación no podemos si no preguntarnos: ¿por qué?.
Aún siendo un problema de ellos, no tienen la patente de la locura y los ejemplos de Noruega y otros lugares nos recuerdan que nadie está a salvo de la sinrazón de un perturbado. Pero el problema no es el perturbado.El error es poder comprar un M-16 por 800 dólares como el que compra una tele en el Carrefour. Algo falla ahí. No hay excusa con la segunda enmienda y el derecho a defender mi hogar, a saltarme la justicia postulandola mía propia.El lejano oeste de hace 250 años no casa bien con la era digital.
Y si alguien puede hacerlo ese es Obama. Tiene mucho a ganar y la historia le recordará si logra mejoras sustanciales, por algo más que el color de su tez.
Lástima de vidas.
Tantas preocupaciones; tantos números echados; cuántos planes y proyectos por realizar;sueños y proyectos y deseos por cumplir; viajes a relizar; todo por delante que se va cuando te quitan la vida. Se acaba todo, lo que tenías,tienes o podrías tener.Sólo con un irracional y leve movimiento se acaba,se arrebata todo, dejando sólo dolor, pena e incomprensión.
Como persona,padre y profe me pregunto por qué y ruego al altísimo por el alma de esas veinte desafortunadas criaturas y las seiscompañeras que han pagado tan alto precio en el desempeño de tan maravillosa labor.Aunque sé que eso no consolará a las familias.
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